Dios un amor incondicional

En lo que llevo de  vida Dios me ha puesto en el camino a personas que con sus acciones, con la cotidianidad de sus vidas, me han hecho ver que si uno se entrega a Dios, que si uno trabaja para Dios, y vive una vida para Dios a pesar de las dificultades que presenta la vida, se puede seguir pa’ lante.  Entregarse a Dios es lo mejor del mundo, Él así como dice la letra de una canción de Gilberto Santa Rosa, nos dice “Yo no te pido cosas imposibles de alcanzar”. Dios no nos pide que no tengamos miedo sino que tengamos la fuerza y la fe para vencer ese miedo, esa Fe que Jesús le pidió a los Apóstoles cuando estaban en la barca, que le pidió a Pedro cuando le ordeno caminar sobre las aguas  nos lo pide a nosotros.  Esas personas que mencionaba y decía que Dios me las puso en el camino también me han enseñado que entregarse a Dios no  solamente lo hacen los sacerdotes o las religiosas, sino  TODOS estamos llamados, TODOS estamos invitados por Él para conocerlo, esa invitación que nos hace Dios no tiene fecha de vencimiento, Él siempre estará atento a nuestro deseo de conocerlo, de acercarnos a ÉL, tenemos el ejemplo de  grandes hombres y grandes Santos que se la pusieron difícil a Dios y se negaban a aceptar esa invitación como lo fueron San Ignacio y San Agustín, pero al final  luego de lograr convertirse podemos ver  la Obra que Dios hizo en ellos y que nos demuestran una vez más que para Dios no hay imposibles, además de demostrarnos que si lo dejamos hacer cosas maravillosas en nosotros, nos va a ir muy bien, una frase que siempre me ha gustado fue la que le dijo Domingo Savio a Don Bosco: “Sea usted el sastre, yo seré la tela”, Dios nos invita y nos deja la puerta abierta para que nosotros  le digamos eso a ÉL, y veremos cómo nos va  a ir mas que bien, ya que Él lo puede todo, y Él ya tiene lo que quiere para nosotros, nos pide seguridad y vuelvo a citar la canción de Gilberto Santa Rosa “No nos pide un salto en el vacío”.

Por último  creo que como buenos cristianos estamos llamado a vivir “a medias con Dios”, y que significa vivir “a medias con Dios”, pues reconocer como lo hizo Don Pedro Legaria, que todo lo que tenemos, pensamos, hablamos, todo proviene de Dios, nada es nuestro; ni las habilidades, ni sabiduría, ni nada es nuestro, todo es de Dios. Por lo tanto estamos llamados a compartir todo con ÉL, nuestras alegrías, esperanzas, deseos, sueños, dolores, preocupaciones, responsabilidades, etc. Eso nos llevara a buscar a Dios en todos los acontecimientos bien sean alegres o tristes, y recordemos que Solo Dios llena las aspiraciones del hombre como lo decía Don Pedro.

                                                       Israel David
                                           MACREYISTA-Venezuela

"El fundamento de toda vida interior es la unión con Dios" 

Don Pedro Legaria